
En el Auditorio del Campus Providencia se realizó el conversatorio “Educación inclusiva sin barreras”, el que fue organizado por UDLA y la Fundación DownUp. El encuentro tuvo como objetivo orientar a padres en temas legales sobre el acceso a la educación de sus hijos con síndrome de down y cómo eliminar las barreras a la inclusión.
La jornada contó con la participación de la Directora de la Escuela de Educación Diferencial, Cecilia Peñafiel, quien señaló la importancia de poner este tipo de problemáticas sobre la mesa: “estamos en un momento social muy importante donde se están abriendo todos los espacios de inclusión que son muy necesarios para vivir en una sociedad respetuosa. Por lo tanto, que la Universidad propicie estas instancias en que podamos acercarnos a diversas organizaciones y podamos también traspasar a nuestros estudiantes y a la comunidad en su conjunto la importancia de la inclusión de la diversidad, realmente es un aporte tanto para la institución como para la sociedad”.
El conversatorio contó con dos bloques. El primero se desarrolló en torno al tema de los “Derechos en Educación Inclusiva sin barreras”, donde participó Claudio Pinto, de la Defensoría para la discapacidad, quien se refirió a qué hacer cuando los derechos de las personas con capacidades diferentes son vulnerados.
Pinto explicó cómo ayuda su fundación a los padres que están en búsqueda de un colegio para su hijo: “somos los únicos en Chile que hacemos activismo legal. Somos abogados que nos dedicamos a tres cosas: hacer defensa legal, formar y realizar cursos de incidencia política. Esta actividad es una ganancia para la sociedad, sus familias y para UDLA”.
En la segunda parte se conversó sobre “Barreras y aportes desde la familia a la Educación Inclusiva”, donde familias que son parte de la fundación DownUP contaron su experiencia y procesos en la búsqueda de colegios que integran a sus hijos.
La Directora de esta organización, Andrea Allamand, explicó que la Fundación DownUp “acompaña y empodera a las familias con hijos con síndrome de down. Es una comunidad que da la bienvenida cuando conocen la noticia. Miramos al síndrome de down con orgullo y naturalidad, no como un problema, sino que como un aporte a la sociedad”.
Además, agregó que “para nosotros, UDLA es muy importante. El hecho de que la universidad abra las puertas a estos temas es importante, para que lo difundan con sus estudiantes y que tengan ese rol de innovación como nosotros lo hemos hecho con la sociedad, estamos felices de apoyarlos”.

