En uno de los casos penales más comentados de los últimos tiempos, por la gravedad de las diversas lesiones causadas a la víctima, Nabila Rifo, el 18 de abril de 2017, el Tribunal Oral en lo Penal de Coyhaique efectuó la lectura del veredicto condenatorio en contra de Mauricio Ortega, expareja de la víctima.

 

En fallo dividido, dictado por los magistrados Rolando del Río, Pablo Freire y Mario Reyes,se estableció la condena para el acusado como autor del delito de violación de morada violenta, de femicidio consumado y de lesiones graves gravísimas, cometidas contra su conviviente y madre de dos hijos, Nabila Rifo.

 

A través de las diversas pruebas rendidas en juicio, las cuales habrían conducido a un resultado  lógico y concordante, se acreditó en el juicio, más allá de toda duda razonable, que la víctima fue golpeada por el imputado con un trozo de concreto, sufriendo lesiones gravísimas dejándola inconsciente, y sufrió la  extracción de sus dos globos oculares, todo lo cual puso en riesgo su existencia y truncó su proyecto de vida. Cabe señalar que el juez del Río manifestó su voto de minoría al estimar que el imputado habría sido autor del delito consumado de mutilación de un miembro importante y no de femicidio frustrado.  

 

Este caso estuvo marcado por las contradicciones en que incurrió la víctima, quien habría señalado previamente al juicio, en declaraciones a una sicóloga y a un siquiatra una vez que recuperó su consciencia, que el atacante era una persona distinta a su pareja y, con posterioridad, en su declaración en el tribunal, modificó su versión, señalando que su agresor fue Mauricio Ortega y que habría querido protegerlo por ser el padre de sus hijos.

 

Otro aspecto controversial se refirió a las preguntas que el defensor de Mauricio Ortega le formuló a la víctima en relación con su vida sexual, su forma de vestir y su rol como madre, lo cual llevó a cuestionar si la estrategia utilizada por el abogado defensor constituyó una forma de violencia y/o discriminación contra la mujer y a si existen límites en la forma de ejercer la defensa de un imputado.

 

La lectura de la sentencia definitiva se fijó para el día 2 de mayo de 2017, fecha a partir de la cual se conocerá la condena del imputado y en la que los intervinientes tendrán la posibilidad de interponer un recurso de nulidad contra el fallo, a fin de que se ordene la nulidad de la sentencia o del juicio completo, por la Corte de Apelaciones de Coihaique o Corte Suprema.